
Rea Kerr no es buena persona. Como líder del grupo de mercenarios espaciales Horizonte Rojo, se dedica a disparar a gente de planeta en planeta por dinero. Bebe demasiado. Su vida social es un desastre y tiende a acabar en la cama con quien menos le conviene. Como, por ejemplo, con miembros de su tripulación.
Después de que una de sus misiones se le complique y deba enfrentarse a uno de sus compañeros, lo que parecía un encargo fácil acaba convirtiéndose en un infierno. Al fin y al cabo, Kerr no sabe qué es peor, si una lluvia de disparos de los bien entrenados soldados de la Torr’Arrian o las heridas emocionales, esas que los nanomédicos no curan tan fácilmente.
En este volumen se recopilan los tres primeros números de Horizonte Rojo (Un encargo fácil, Envío especial y Sin salida), una space opera que mezcla acción futurista con escenas eróticas realistas y atrevidas.
Después de que una de sus misiones se le complique y deba enfrentarse a uno de sus compañeros, lo que parecía un encargo fácil acaba convirtiéndose en un infierno. Al fin y al cabo, Kerr no sabe qué es peor, si una lluvia de disparos de los bien entrenados soldados de la Torr’Arrian o las heridas emocionales, esas que los nanomédicos no curan tan fácilmente.
En este volumen se recopilan los tres primeros números de Horizonte Rojo (Un encargo fácil, Envío especial y Sin salida), una space opera que mezcla acción futurista con escenas eróticas realistas y atrevidas.
La primera vez que oí hablar de este libro (y de su autora) fue durante el festival Celsius 232 de este año. Tenía una firma a la que unas amigas querían asistir y a raíz de aquello empezamos a hablar con ella y fuimos coincidiendo los siguientes días. Ella misma fue la que mejor me vendió su novela, catalogándola como cifi erótica, palabras textuales. Captó mi atención en seguida y cuanto más hablaba más me convencía. Así que al final no me pude resistir y aquí estoy hoy intentando convenceros de leer la novela, aunque no lo haga la mitad de bien que Rocío.