13 reasons why es la nueva serie de Netflix y si no habéis oído hablar de ella aún es que vivís en una cueva. Hasta mis conocidos menos seriéfilos la han visto ya. Este boom ha traído consigo polémica y fangirleo a partes iguales. A mí, particularmente, me ha gustado mucho. He disfrutado viéndola, me he metido en la historia y me ha dado qué pensar. Pero también tiene muchos detalles que no me han gustado absolutamente nada. Por eso, he decidido traeros unos cuantos argumentos positivos y negativos que he ido extrayendo de la serie.

13 razones por las que me gustó Por 13 razones...

• Hannah tiene momentazos. Antes de ser sometida al acoso continuado de la mayoría de sus compañeros, Hannah es la clase de chica que me encantaría que fuera mi amiga. Es ingeniosa y divertida, y la forma que tiene de tontear con Justin, por ejemplo, me parece demasiado fantástica (aunque está claro que en la vida real no le habría salido tan bien la jugada del autobús).


• Actuación. La mayoría de los actores me han sorprendido para bien. Ninguno era especialmente conocido y no esperaba gran cosa de ellos al tratarse de una serie normalita para adolescentes, pero han superado con creces mis expectativas. Especialmente, me gustaron Justin, Jessica y Alex, porque sentí a los personajes a través de ellos y me permitieron ponerme en su pellejo. Tony y Bryce tampoco se quedan atrás en este aspecto.
• La banda sonora es alucinante. Además, acompaña muy bien a la trama desde el primer capítulo, cuando Tony pone Joy Division en su coche y nos aproxima por primera vez a las cintas de cassette y la importancia que estas tendrán a lo largo de la serie. La mayoría de las canciones son bastante conocidas e incluso hay un par de versiones interesantes interpretadas por Selena Gómez. Aquí tenéis todas las canciones ordenadas por capítulos por si queréis haceros una idea antes de ver la serie.
• Engancha. Gracias al misterio sobre quién aparecerá en las cintas, qué le habrán hecho a Hannah y, sobre todo, qué habrá hecho Clay, no puedes evitar las ganas de ver el siguiente capítulo. Los capítulos son demasiado largos para mi gusto, pero eso no es un impedimento para disfrutarlos e incluso pueden llegar a parecerte cortos cuando la trama se vuelve muy emocionante.


• Critica abiertamente el acoso sexual que recibe Hannah por parte de Bryce en el segundo capítulo. En esa escena, él le toca el culo sin su consentimiento, para “comprobar” si la lista de Alex es correcta. Ella se queda paralizada por la sorpresa, la vergüenza y el miedo, y él se marcha sin consecuencias ni cargo de conciencia, dejándola con un fuerte ataque de ansiedad y culpabilidad. Me parece muy importante que se retrate esto, porque visibiliza la cosificación a la que las mujeres estamos sometidas cada día. Ya no es solo que los chicos del instituto se sientan en el derecho de valorarlas respecto a sus atributos físicos, es que no tienen reparo en tocarlas a su antojo, en objetificarlas de forma física, dejando a Hannah con la horrible sensación de haber sido degradada a algo inferior que una persona.
• Esto no tiene nada que ver con la serie en realidad, pero durante un tiempo se rumoreó que los actores de Justin y Alex están saliendo juntos en la vida real y nunca he visto nada tan bonito en toda mi vida. Trágicamente, no es real, pero os merecéis ser felices viendo sus fotos:


• No te lo ves venir. Hacia la mitad de la serie todos empezamos a odiar a Courtney con más o menos vehemencia, pero antes de su cinta, ¿quién diría que era tan cruel? Lo mismo, aunque más dramático, ocurre con Jeff. Es obvio, si lo pensamos detenidamente, que solo aparece en los flashbacks de Clay, pero pocos se dieron cuenta de ello o de lo que significaba en realidad.
• Volviendo a Courtney. En sus primeras escenas, ¿cuántos de vosotros pensasteis que podría tener dos padres? ¿O simplemente que sería adoptada? El hecho de que se muestre a su familia de forma velada hasta el final de su cinta evidencia la crítica que hace la serie contra la heternormatividad y lo mucho que nos influye. Se hace así también mediante el personaje de Tony. ¿Por qué Clay necesita que le diga explícitamente que es gay para darse cuenta? No es que sea tan despistado que no pudiera verlo por sí mismo, ni Tony es tan discreto como para que no resultara evidente. Es que la heteronorma nos tiene acostumbrados a pensar que todos cuantos nos rodean son heteros hasta que se demuestre lo contrario.


• Hace una crítica brutal al sistema educativo americano. El instituto organiza una feria de información e inscripción a la universidad y Hannah acude con una perspectiva escéptica y muy acertada. No he encontrado la cita literal, pero viene a decir algo así como que a todos nos dicen desde pequeños que podemos conseguir todos nuestros sueños, y después nos encierran en colegios, en los que nos enseñan a pensar de la misma manera durante años, y nos impiden acceder a la universidad si no tenemos suficiente dinero o nota media.
• Las reacciones de los personajes son realistas (a veces). Una antigua amiga se suicida y deja grabadas unas cintas en las que te culpa a ti, entre otros, de ser la razón por la que se ha quitado la vida. ¿Qué harías tú? En esta serie se dan a conocer todas las reacciones posibles a esta situación: culpabilidad, por supuesto, miedo, agresividad, rechazo… Y todo lo que ello conlleva (¿a alguien le extrañó que Alex intentara suicidarse o que Clay buscara venganza?).
• No sabía en qué categoría meter a Tony, pero como no lo odio exactamente, vamos a dejarlo aquí. Tony es un personaje bastante inútil. Se dedica a perseguir a Clay por toda la ciudad para recordarle que tiene que ver las cintas, y le atosiga con consejos súper profundos sobre la existencia. Pero nada más. ¿Me parece cuqui? Sí. ¿Es relevante para la trama? Pues no mucho.


• Monet's. La preciosa cafetería en la que se refugian todos los personajes de la serie es como un pequeño rincón de felicidad y solo de imaginar que pueda existir es reconfortante.
• Esta se la robo a Iria: ha generado debate. Mira que me molesta que ciertos temas importantes se discutan solo cuando una serie, libro o película los pone de moda. Pero hay que reconocer que ha funcionado. Para bien o para mal, la gente está hablando del suicidio, del bullying, de la depresión y, en menor medida, también de la cultura de la violación. Muchas de las conversaciones que he avistado por redes sobre esta serie me han servido para escribir esta entrada. Algunos señalaban puntos positivos que no había conseguido ver, otros remarcaban lo que yo ya había pensado. Pero, en cualquier caso, creo que ha resultado enriquecedor para la mayoría. Así que os animo a verla y a entrar en el debate.

...y 13 razones por las que no me gustó

• Parece que no hay ninguna alternativa al suicidio. Entiendo que se esté contando una parte de la realidad, en la que la depresión le impide a Hannah ver que podría contar con familiares y amigos para superarlo y en la que los orientadores (o psicólogos, o trabajadores sociales) son completos ineptos. ¿Pero realmente es ese el mensaje que queremos lanzar al público adolescente? "Lo siento, chica, si te acosan sexualmente no hay salida. La única paz la encontrarás en la muerte". Tenían numerosos personajes con los que dar ejemplo de que hay otros caminos (Alex, Jessica, Justin), pero en lugar de eso han mostrado otro suicidio, una chica que no denuncia violación por miedo y un chaval que se queda en la calle sin que los servicios sociales hagan nada.
• El amor nos salva. Sí, vale, Hannah se suicida. Pero el mensaje de la serie, el “qué hubiera pasado si…” del capítulo 11, cuando Clay escucha su cinta, sugiere precisamente que había una forma de salvarla. Y no era denunciar los abusos, ni hablar con un profesional, ni con sus padres. La solución a que una chica sea acosada sexualmente por medio instituto es que se eche novio. Claro que sí. Porque la depresión se esfuma cuando estás enamorada. No sé cómo Netflix aún no ha ganado un premio de medicina por esto.


• La representación familiar da penita. Solo se profundiza un poco en las familias de Clay y Hannah, pero ambas me parecen horribles. La madre de Clay, aunque evoluciona de forma bastante interesante en los últimos capítulos, queda representada como una histérica en comparación con la postura desenfadada de su marido. Y lo que más nos queda de ella al final es esa sensación de que está exagerando por todo, y no que es una abogada de éxito que trabaja para un gran buffete y que se enfrenta al dilema moral de si seguir sus instintos profesionales o personales.
  Pero los padres de Hannah son mucho peores. Se idealiza su matrimonio cuando en realidad se basa en que él toma importantes decisiones económicas sin consultarle y ella apechuga con las consecuencias o, en el mejor de los casos, le grita, queda como una histérica también, y después le perdona cuando le trae flores y le recuerda los buenos tiempos.
• Salvan al “nice guy” y al final queda como el menos malo de todos. Zach es el típico chico que se cree con potestad para decidir sobre las mujeres en las que se fija simplemente porque “al menos él no es tan gilipollas como los demás”. Es decir, como soy majo contigo, tengo que caerte bien (o tienes que querer salir conmigo), y lo que opines en realidad no importa. Lo demuestra en la cafetería, cuando ella le rechaza y él le monta un numerito para humillarla delante de todo el mundo. Sin embargo, la serie te muestra su arrepentimiento, su culpabilidad, y parece que tiene que caerte bien y pensar que, en el fondo, es un buen chico y hay que quererlo.
• A nadie parece importarle que haya un violador suelto por el instituto y la excusa que utilizan para no delatarle es absurda. ¿Que eso creará un trauma innecesario a Jessica? Bryce provocó la muerte de una persona y violó a más chicas, por lo que se da a entender, Jessica se da a la bebida. Explicadme por qué tiene que ser creíble que nadie diga nada, porque yo no lo entiendo.
• Paralelamente a la escena de acoso de Bryce que he mencionado como positiva, tenemos la escena que propicia la cinta de Marcus, cuando él le mete mano en el restaurante. Hannah reacciona al momento y esta vez es capaz de gritar a su agresor que se aleje, e incluso le empuja para echarlo del asiento. Él, como era de esperar, reacciona de forma bastante agresiva y ella se queda, de nuevo, sola y con su ataque de ansiedad. Esta vez, sin embargo, no tengo la sensación de que se criticara tanto como debiera. Mientras que Bryce queda retratado como un violador y es juzgado como tal por la serie, Marcus queda siempre en un segundo plano. Sus acciones parecen irrelevantes y no se le da más importancia al asunto. Simplemente es otro chico que pensó que Hannah era “una chica fácil”. A mí parecer, el ataque y la reacción de Hannah son mucho más fuertes en esta escena que en la de Bryce. Ella incluso llega a hablar de culpabilidad, pero el tratamiento posterior que se le da es nulo, y me chirrió bastante.
  
  Fun fact: se le da tan poca relevancia a esta escena que no he conseguido encontrar el clip en youtube para reverla y, sin embargo, hay unos tropecientos vídeos sobre “Hannah & Justin love story”. What the fuck is wrong with you, people.
• Mucha gente con bastantes más conocimientos que yo han alertado ya del peligro que supone la escena explícita del suicidio, aunque se avise de ella al principio del capítulo. Yo no sé nada sobre el tema, así que no voy a entrar a más. Desde mi posición, me pareció una escena muy dura (de hecho, no pude mirar), pero no puedo valorar si es o no perjudicial para una persona deprimida o con tendencias suicidas.
• Lo que sí es cierto es que parece que existe una causa lineal y perfectamente identificable para la depresión de Hannah. Y lo más inquietante de todo: que puede solucionarse suicidándote y vengándote de la gente que te ha acosado durante tanto tiempo. De todas formas, no soy quién como para opinar seriamente de esto.
• ¿Depresión? ¿Eso se come? Está más que claro que Hannah sufre depresión, pero en ingún momento se menciona como una posibilidad, se le anima a pedir ayuda médica, ni se le da ningún tipo de importancia. Pero no solamente ocurre con ella (que tiene un poco de sentido, porque la serie va de que como no recibe ninguna ayuda acaba suicidándose), es que Alex y Jessica probablemente también estén deprimidos, y no se indaga en el tema. Sabemos que Clay fue al psicólogo de pequeño y tomaba algún tipo de pastillas, ¿de verdad no era relevante mencionar al menos qué le pasaba? ¿Ni siquiera después de pasarse la serie teniendo visiones de Hannah? Y no hablemos de los traumas de Justin.


• Justin, de hecho, es un punto aparte. Su personaje es muy complejo, y no estoy segura de que me guste cómo lo han representado. Se trata de un chico que ha crecido en un mal ambiente, bajo la tutela de una madre alcohólica y sin padre. La madre es, además, maltratada por su actual novio, el cual vive en su casa y odia a Justin. No me sorprendería averiguar que todas sus relaciones sentimentales han sido parecidas. Se trata, por tanto, de una mujer que, por distintas razones, es incapaz de hacerse cargo de su propio hijo.
  Por desgracia, Justin se ha criado en un ambiente sin amor, sin valores y sin buenos ejemplos a seguir, lo que le ha convertido en un chico con una enorme dependencia emocional. Hasta tal punto que permite que Bryce viole a su novia porque “se ha portado muy bien con él y le ha comprado zapatillas”. Además, cuando por fin se lo confiesa a Jessica, se pasa el resto de la serie intentando obtener su perdón, e incluso amenazándola con suicidarse.
  Esto no es lo peor de todo. Lo peor es que se cuenta de tal manera que se justifican sus actos y, además, en cierto modo, culpa a su madre.


• De hecho, justificar las acciones de personajes tóxicos no es algo aislado. He desarrollado dos de los ejemplos que más rabia me han dado, pero hay más. Tyler, por ejemplo, se dedica a acosar a casi todo el instituto, pero en especial a Hannah. La sigue a todas partes y la fotografía incluso en su habitación. Paralelamente, recibe el acoso indiscriminado de sus compañeros en el instituto, con agresiones físicas y verbales, porque es un “friki”. En pocas palabras: pretenden que sintamos pena por él. Es cierto que el bullying que sufre no lo sufre por acosador, sino de forma aleatoria e injusta, pero qué queréis que os diga, no me da ninguna pena.
  Y digo lo mismo de Alex, que de repente parece que no tiene ninguna importancia que intentara forzar a Jessica a tener sexo con él y después de que ella le dejara se dedicara a acosarla siniestramente durante meses…
• Además, como la historia se centra tanto en Hannah, todo lo demás se toca de manera superflua. Por eso no sabemos nada de Justin, ni del pasado de Clay. Básicamente, no sabemos nada de ningún otro personaje. Esto no sería del todo horrible si esos detalles no fueran esenciales para entender del todo la trama. Hubiera sido, como mínimo, enriquecedor saber qué le pasaba a Clay de pequeño y cómo ha podido afectar al presente.
• Clay utiliza a Skye como sustituta de Hannah. Si ya de por sí odio que el/la protagonista tenga que acabar saliendo con alguien para que se considere que tiene un “final feliz”, este caso en particular me ha cabreado mucho. Da la sensación de que Clay únicamente sale con ella porque siente que así puede salvarla de tener el mismo final que Hannah. Se siente culpable por haber dejado de hablar con ella en el instituto y por no haber hecho suficiente con Hannah, y eso es lo que le impulsa a pedirle salir. No sé a vosotros, pero a mí no me suena nada bien.

Y esto es todo, espero haber escondido bien los spoilers y no haberme dejado nada. ¿Qué os pareció a vosotros la serie?